Desde hace diez días al menos, no puedo parar de ver este vídeo:
Como consecuencia natural, he escuchado casi ininterrumpidamente toda la discografía de Franco Battiato (la disponible en spotify) desde entonces, en random, encontrándome con grandísimas canciones ya conocidas (Nomadi, Bandiera Bianca) y otras muchísímas que no había escuchado nunca. Recuerdo haber tenido, en la época cassette, uno de esos recopilatorios de Battiato cantado en español (no sé si todo o en parte), porque hasta donde yo sé nadie hizo el menor caso a esta bestia parda en España hasta que le dio por grabar Nomadi en nuestro idioma y el vídeo fue pasado asiduamente en La bola de cristal.
Después, desconecté de Battiato, en la medida en que lo encasillé en una canción melódica vagamente transmediterránea; su hermosa voz y su nariz doblemente hermosa seguían siendo las mismas, pero se trataba, creo desde lo lejos, del tipo de artista que continúa viviendo de la fama ganada años atrás (hay una versión en directo, se puede ver en youtube, de Centro di gravità permanente, en la que duplica el tempo y carga las tintas con una sección orquestal de cuerda... too AOR).
Así que lo escuché mucho cuando tenía diez o doce años y paré. Ahora estoy descubriendo al Battiato que grabó discos desde ¡1965!, tiene pasajes de verdadera experimentación sonora, y era capaz de cantar cosas como Non sopporto cori russi / La musica finto rock la new wave italiana / Il free jazz punk inglese / Neanche la nera africana.
El vídeo de Centro di gravità permanente, que me mandó un amigo (desconocido, pero conocido desde los años flickeros), me ha hecho cambiar por completo mi visión de Battiato: histriónico en su seriedad, capaz de la autoparodia, bailarín de tremenda coreografía de vanguardia, ridículo y potente, hermoso, ¡joven! y sin gafas. Ahí donde mira frente a frente a cámara (jamás moviendo los labios en playback), parece querer decirnos: "soy una estrella del pop pero me estoy riendo de vosotros, de vuestras creencias y ambigüedades, de toda la bastarda falta de chispa crítica con la que asumís el mundo y os cambiáis de chaqueta día tras día"; ese gesto, ese rostro resumen una actitud desafiante, anticomplaciente, ácida y punk, que me parece hoy no necesaria, sino imprescindible.
Al mismo tiempo, todo esto entronca con la propia rabia que genero dentro, que no sé de dónde viene, y con la lectura compulsiva de Vida y opiniones de Lector Malherido, quien, se me antoja hoy, se encuentra bastante representado en la letra de Centro di gravità permanente. Yo no sé lo que es una opinión contundente. No estoy segura de nada, no me apego a ningún proyecto, no tengo la más mínima certeza, ni siquiera de estar aquí ahora mismo escribiendo esto frente a una pantalla de portátil, ni siquiera de estar escuchando en random la discografía completa de Battiato. Yo no busco un centro de gravedad permanente, aspiración que Battiato y yo sabemos que es una entelequia; me basta con poner en mi altarcito de dioses paganos la beligerancia humanística de Battiato, para siempre. Mis obsesiones dan para esto y no más.
Nos mudamos
Hace 11 años
5 comentarios:
Encima tengo parte de culpa...
:-)
Es una buena culpa, don´t worry. La semilla estaba plantada y la regaste :D
Sevi es un devoto, y a mi me pasó lo mismo que tu cuentas a lo largo de los años hasta que hace poco lo redescubrí. El menda se marcó un disco de ruido blanco por ambas caras para finiquitar el contrato abusivo con su discográfica (vamos, igualito que Berlanga, Auserón, La Mode, etc...) y luego se le fué la pinza con las orquestaciones y la música incidental.
Mi favorita y muy pinchada en el Gris es "Via Lattea".
Y además, el suyo fue uno de los mejores conciertos que se han visto en la historia musical sevillana.
Fui afortunado testigo.
Mi anónima favorita, echas de menos el Gris... eh?
Carrascus, eso te lo envidio de veras. Yo podré contarle a mis nietecitos que Gepe me dedicó anoche (otra vez) una canción desde el escenario :P
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