jueves, 12 de marzo de 2009

Gimme that Jazz en Calle 20

Un día llegas a casa y tu ordenador portatil no quiere arrancar más. Por supuesto, llevas al menos doce meses sin guardar los archivos en otro sitio lógico, para estos menesteres. Llamas por teléfono a los bomberos más inmediatos: se arremangan la camisa y trabajan durante dos días. Ves sus musculosos brazos abrirse camino entre cables, trozos de chips, conectores, placas madre y la madre que los parió. A ratos, pareciera que no va a haber más remedio que renunciar a doce meses de escribir: ciento cincuenta páginas de un libro muy lejos de ver mi luz, y docenas de reseñas, comentarios, reportajes, críticas que haces sólo para ti misma, reflexiones, semi-ensayos, carcajadas, veleidades.

Pero los bomberos todo lo pueden. Son super-hombres. Sus musculosos brazos de nada servirían sin unas gigantescas y bien provistas cabezas. Los quiero. Me quieren. Me arreglan el ordenador portátil para que pueda seguir acumulando mi basura intelectual. Qué felicidad.

Por su intrépida actuación, digna de un canal de documentales de accidentes, hazañas, proezas y catástrofes, puedo hoy contaros que, por fin, apareció mi reportaje acerca de "nuevos valores del jazz", o músicos extraordinarios, medio locos, solventes instrumentistas, muy muy jóvenes, que no tienen reparos en introducir en el jazz cuantos elementos les parezcan apetecibles. Reportaje "Al jazz lo que no es del jazz" en Calle 20. Aquí, dejo enlace a la revista, que se puede leer enterita en pdf (si no la encuentras en tu bar favorito):


Y, aquí, quien quiera puede leer el reportaje (pdf).

3 comentarios:

Rafa Gil dijo...

En cuanto llegue a casa hago ese maldito backup que llevo tanto tiempo prometiéndome.

Carolink dijo...

Y? Lo hiciste? ¡Mas te vale!
(después de restaurar casi todos los programas y ¡todos! los archivos, ya tengo el reportaje publicado como debía, al fin).

Rafa Gil dijo...

Lo hice, no completo pero lo hice.