jueves, 22 de julio de 2010

Picnic

Buscaba algo en la inmensa barriga de mi gmail, y apareció este poema-email (datado en cualquier día de hace muchos años). No sé por qué lo pongo aquí. Por la entrada anterior, supongo.

concibo la vida queriéndote

y el poema más prístino
es la lista de la compra

si acaso salieses o salieras
tráenos cervezas
2 pechugas de pollo
y existirá el requesón en estas tierras?
recuerdas aquel plato de pollo frío, aliñado al cilantro?
recuerdas las frescas noches de verano de Santiago,
con esa comida en nuestros platos?
yo sí
yo me acuerdo de todo
pues ahora hay un paraje en la sierra
esperando a los domingueros
podemos sumarnos a ellos
el domingo, por ser
que es un gran día a pesar de su mala fama
como dijimos el otro día
nada cae en saco roto
ni una pestaña tuya se pierde en el infinito
unos refrescos y un picnic suculento
sólo si a ti te apetece más vida de gitanos
de esa que a mí me gusta tanto

No hay comentarios: